viernes, 5 de diciembre de 2008

Si luego viene un dios y me lo pide.

“Yo pasaré y apenas habré sido,
-frágil destino de mi pobre arcilla-“.
Ángela Figuera.

Si luego viene un dios y me lo pide.

Si luego viene un dios y me lo pide
le ofreceré la historia de mi vida,
porque si a él le sirve, estoy de acuerdo;
a mí no me sirve ya de nada.

Que busque, que rebusque; aquí le queda.
Que escoja lo que quiera, todo es aire;
sólo sueños...humo...paja,
y algún pequeño resto de quimera.

Llorar para llorar porque lloraba;
llorar a un porvenir porque llegaba;
llorar a la ilusión porque se iba;
llorar por aquel tiempo perdido;
aquel tiempo de rosas y de vino,
hueco de amor, de mí...de albas...

Las flores que corté se marchitaron
como un fugaz suspiro,
como una llamarada,
y apenas su perfume me mantiene
esta pequeña voz para cantarlas.

4 comentarios:

Mamen Alegre dijo...

Bellísimo e impecable . Espero que la tristeza vuele con las nubes y el frío, el sol siempre vuelve.

Te envío un abrazo grandísimo y unas píldoras de alegría.

Martha Jacqueline Iglesias Herrera dijo...

Muy bello querido amigo. Tu forma de decir llega a lo infinito del alma. Siempre un gusto leerte.

"Las flores que corté se marchitaron
como un fugaz suspiro,
como una llamarada,
y apenas su perfume me mantiene
esta pequeña voz para cantarlas"

Un beso grande y feliz domingo

El Hombre Blanco dijo...

"Si luego viene un dios y me lo pide
le ofreceré la historia de mi vida,
porque si a él le sirve, estoy de acuerdo;
a mí no me sirve ya de nada"

Por si ese dios no te la pidiera, yo, amigo Octavio, te la pido: ¡cuéntame, por favor, la historia de tu vida!
Un abrazo

Anónimo dijo...

Yo te leo y pienso: qué viejo
para ser tan joven y qué triste
cuando es obligación no estarlo...
BB.